
BABY TWO ANNOUNCEMENT
20 noviembre 2022
MENÚ SEGUNDO TRIMESTRE DE EMBARAZO
15 enero 2023Estamos en Navidad de 2022 y eso significa que hemos llegado a la mitad de estas maravillosas y únicas 40 semanas de mi vida. ¡El tiempo ha pasado volando y ya hemos llegado al ecuador del embarazo! Si me sigues desde hace un tiempo sabrás que hace 15 meses hice público nuestro nuevo deseo gestacional y que el pasado otoño os conté que volvía a estar embarazada. Este embarazo lo he nombrado mucho, muchísimo, desde el inicio, desde antes de que se produjera; así que hoy en este post quiero contarte cómo ha sido la primera mitad de mi segundo embarazo. Porque hay una frase que me encanta y que dice: “El embarazo es una etapa que solo pasa una vez en la vida porque, aunque tengas muchos hijos, ¡cada embarazo es único y especial!”. Y así es.
El embarazo es una etapa que solo pasa una vez en la vida porque, aunque tengas muchos hijos, ¡cada embarazo es único y especial!
Aunque parezca obvio, la principal diferencia respecto el primer embarazo es justamente esa: que no es el primero y que, por tanto, tengo otra bebé pequeña a la que atender. ¡Y madre mía cómo se nota esa diferencia! Ya lo dicen las “bimamis”: pasas de cuidarte y descansar siempre que lo necesitas a “sobrevivir” y hacerlo solo cuando te lo permite tu otro/a bebé… ¡Nada que ver!
Desde el inicio hasta las 20 semanas de embarazo
Como ya os había ido contando aquí en el blog, fue justo al terminar “los primeros 1.000 días de vida” de Paula, justo cuando nuestra hija mayor cumplió sus 2 años, que me volví a quedar embarazada.
Pero llegar hasta aquí no ha sido un camino nada fácil. En mayo de 2021, cuando nuestra primera hija cumplió 9 meses, sentimos que era el momento de empezar a buscar a nuestro segundo bebé, nos surgió de nuevo el deseo gestacional. Pero en la búsqueda de este segundo embarazo todo ha sido muy distinto al primero. El deseo gestacional floreció intensamente, pero, en ese momento, la búsqueda del segundo embarazo no era “real”. Yo tenía amenorrea producida por la lactancia, mi cuerpo no estaba ovulando, así que, por mucha ilusión y ganas que tuviéramos, la búsqueda no era posible.
Finalmente ocurrió el milagro de la vida después de 15 meses de deseo gestacional, destete completo de Paula y 9 ciclos menstruales. Sobre todo ello podéis leer la historia completa del camino recorrido hasta aquí en el post titulado buscando nuestro segundo embarazo. Como el primero, éste es un embarazo planificado y muy, muy, deseado. Pero la búsqueda ha sido completamente distinta.
Así que, empezando por la propia búsqueda, ya me he dado cuenta que hay similitudes, pero también muchas diferencias, entre ambas gestaciones.
Una cosa importante tienen en común: la verdad, tengo que reconocer que no me puedo quejar en absoluto. La primera mitad de mi segundo embarazo ha sido muy buena también: sin náuseas, sin vómitos y sin otros síntomas molestos. Igual que con el primero. Me he encontrado muy bien desde el primer día, lo que sí he tenido desde el inicio a diferencia del primero es mucho más cansancio. No lo achaco solo al embarazo en sí, con una pequeña de 2 años recién cumplidos, el cansancio ya era algo presente en mi día a día, pero se acentuó durante las primeras semanas. Justo cuando yo estaba más cansada en esas primeras semanas, Paula de alguna forma lo captaba a su manera y a la vez me requería más cerca de ella que nunca. Fue agotador.
Eso sí: realmente, la primera mitad del embarazo pasa muy rápido. Entre descubrir nosotros mismos la gran noticia, pasar las primeras semanas de cansancio y sueño intensos, hacer las primeras pruebas médicas y darlo a conocer a la familia y amigos más cercanos, como os conté en ”baby two announcement”, te das cuenta de que ¡ya casi ha pasado todo el primer trimestre de embarazo!

Así que, a modo de resumen, la búsqueda gestacional ha sido larga y el cansancio y sueño de las primeras semanas intensos, pero todo ha ido genial. Otro aspecto que ha marcado esta primera mitad es que me detectaron alto riesgo de desarrollar preeclampsia (tensión alta durante el embarazo), así que toca tomarme 1 aspirina diaria a modo preventivo y controlar de cerca este tema. Además, ¡esta vez sí hemos querido saber el sexo de Baby Two!
La búsqueda gestacional ha sido larga y el cansancio y sueño de las primeras semanas intensos, pero todo ha ido genial. Además, ¡esta vez sí hemos querido saber el sexo de Baby Two!
El seguimiento por partida doble
Precisamente porque cada embarazo es único y especial, tenía claro que de nuevo quería guardar un bonito recuerdo de todo el proceso y desde el principio os he estado mostrando y contando por redes sociales lo más importante de la evolución del bebé. Y aquí está el resultado de lo que llevamos hasta ahora:
A las 4 semanas y 3 días supimos ¡que el embarazo había llegado! Como en el primer embarazo, no han aparecido náuseas ni vómitos, pero sí que me sentía cansada, muy muy cansada…
A partir de las 4-8 semanas hay una diferenciación de los diferentes grupos celulares que darán lugar a las diferentes partes del cuerpo. Empieza a latir rápidamente el corazón y también se acaba de formar la placenta, que a partir de la semana 8 será la encargada de coger de la mamá los nutrientes y el oxígeno y transferirlos a través del cordón umbilical.
¡La semana 8 fue maravillosa! Empecé a notar el aumento de volumen en mi barriga, hicimos las primeras ecografías y recuperé la ropa de premamá. También retomé el yoga prenatal y, parecerá una locura, ¡pero muy poco después empecé a notarte YA dentro de mi, aunque en el primer embarazo no me ocurrió hasta la semana 19!
A partir de aquí, el embrión se llama feto. Se continúan formando todos los órganos.
En la semana 9, el día de mi cumpleaños (9 de octubre), lo contamos a familia y amigos y esa misma noche hicimos “pública” la noticia. El ”baby two announcement” del que os hablaba antes.
En la semana 10 tocó analítica del primer trimestre, vacuna de la gripe y odontólogo. A las 12 semanas, el feto y la placenta están totalmente formados, y a partir de este momento se inicia un proceso de maduración de los órganos. Por fin, la importante ¡ecografía del 1º trimestre! A diferencia del primer embarazo, esta vez me detectaron alto riesgo de desarrollar preeclampsia (tensión alta durante el embarazo), así que toca tomarme 1 aspirina diaria a modo preventivo y controlar de cerca este tema. También a las 12 semanas me realicé el test de ADN no invasivo.
Entre las semanas 13-16, los órganos van madurando y se adquiere cada vez más el aspecto de un bebé. La piel se recubre de un pelo suave, el lanugo. El bebé empieza a responder a estímulos y cada vez tiene los movimientos más coordinados.
A las 14 semanas ¡empezamos segundo trimestre! A partir del segundo trimestre, está creciendo a gran velocidad. Fue justo cuando recibimos los resultados del test de ADN, por mi ginecóloga que los revisó supimos ¡que todo estaba bien! Pero en ese momento nosotros no abrimos los resultados porque quisimos no saber aún el sexo de BABY TWO. No fue hasta las 15 semanas, que celebramos en familia el “GENDER REVEAL de BABY TWO”, te hablaré de esta fiesta más adelante.
Por cierto, en las 16 semanas mi barriga hizo “POP”. Y “cuando haces pop ya no hay stop”.
Las 20 semanas de embarazo coinciden con mi mejor regalo de Navidad. Es tan real cuando digo que no quiero ni necesito ningún regalo estas Navidades, que el mejor de los regalos lo llevo dentro y que nuestra mayor felicidad es disfrutar de lo que ya tenemos. Así que mi único deseo es tener salud para disfrutarlo.
La misma semana de Navidad tuvimos la ecografía morfológica de las 20 semanas y todo está perfecto. ¡El mejor de los regalos en estas fechas tan señaladas!
Cerré una pequeña herida emocional. La ecografía de las 20 semanas del primer embarazo tocó en abril de 2020, ¿os acordáis de cómo estábamos en ese momento? En lo peor. Ese 3 de abril fue el único día que salí de casa durante esas semanas. Mi marido me acompañó hasta la puerta del centro médico, pero no pudo entrar. Tuve que estar completamente sola en un momento decisivo tan importante, él se perdió para siempre esa y muchas otras cosas del primer embarazo que ya nunca volverán. Quizá poco se ha hablado de todo lo que vivimos las que fuimos mamás en 2020, pero la incertidumbre era total… Todo fue bien pero se me quedó clavada esa espina. Lo podéis leer todo en primera mitad de mi primer embarazo. Ese primer embarazo no volverá, pero la ilusión de ayer compartir ese momento fue máxima.
…CONTINUARÁ…
Paralelamente, también he querido realizar un segundo seguimiento fotográfico, esta vez junto a Paula, para recordar lo rápido que el embarazo pasará a la vez que ella va creciendo a una velocidad de vértigo. Os dejo con los mensajes que sobre este segundo seguimiento he ido compartiendo en redes sociales:
BabyOne y el embarazo de BabyTwo:
Este es un embarazo de tres, lo fue desde el inicio. Porque todas las decisiones tomadas por el camino hasta llegar aquí ya no solo nos afectaban a nosotros dos, sino también a nuestra bebé de (en ese momento) menos de 1 año…
Y eso fue y será así, para toda la vida. Desde la decisión de reducirte las tomas de lactancia materna primero, tener que destetarte del todo después, hasta el hermanito o hermanita que deseo que tengas a tu lado durante toda la vida. Todo te afecta, lo sé. En casa ya no somos dos, sino una familia de tres en proceso de convertirse en una familia de cuatro.
Por todo ello quería tener un seguimiento contigo, a tu lado. Juntas iremos viendo cómo crece la barriga, pero cómo creces tú a la vez también.
Hace días que te veo más mayor. Y me planteo si son todos los cambios de los 2 años o soy yo, que “quiero hacerte mayor” a raíz de saber que pronto serás hermana mayor.
Te quiero Paula. Me encanta vivir la experiencia de este segundo embarazo a tu lado. Me encanta ver cómo sonreíste el día en que te dimos la noticia, cómo notas “que algo está cambiando” y me reclamas mucho más (algo muy intenso por otro lado, cuando yo tenía a tope de cansancio y tu a tope de demanda conmigo), pero te entiendo. Yo también fui hermana mayor con 2 años y medio. Y luego nos enamoras cada vez que dices la palabra “bebé”, cada vez que me pides poner la oreja en mi barriga y le llamas esperando su respuesta, cada vez que me tocas…
Y aún no eres consciente (normal) de todo lo que está por venir, lo iremos descubriendo juntas “maduixeta meva”.
Precisamente porque cada embarazo es único y especial, tenía claro que de nuevo quería guardar un bonito recuerdo de todo el proceso
Y, ¡de momento hasta aquí! El resto ya vendrá en la segunda mitad de gestación…
Mis “imprescindibles” para la primera mitad de embarazo
Hace un par de años y como mamá primeriza, os preparé una lista con mis básicos para la primera mitad de mi primer embarazo: yoga para embarazadas, pelota de pilates y ropa premamá.
Esta vez estoy practicando yoga prenatal de nuevo desde la semana 8 de embarazo, es decir, desde antes incluso de contarlo a familia y amigos. Sé que en todos los sentidos esta práctica me fue genial la primera vez, ¡así que quería repetir experiencia sí o sí! El yoga siempre me ayuda mucho, muchísimo. Alguna diferencia eso sí respecto la primera gestación es que por ahora no tengo todavía pelota de pilates (¡aunque he pedido una para Reyes!) y que, esta vez sí, he comprado y tengo bastante más ropa premamá. Por varios motivos: porque la barriga ha empezado a crecer mucho antes que en el primero, porque la época del año es distinta y, sobre todo, por lo que se vivió en 2020.
El confinamiento y la pandemia marcó mucho, marcó muchísimo ese primer embarazo. De las 18 hasta las 28 semanas de mi primer embarazo no pude ver a nadie, a nadie más que mi marido, todo el día encerrada en casa y sin saber del cierto la gravedad de lo que teníamos encima. Con mucho miedo y respeto. Hay que haberlo vivido para poderlo entender. Quizá desde fuera se ve frío o pueda parecer algo sin importancia, pero una de esas cosas fue romper la ilusión por “lucir” y “disfrutar” del embarazo, del que justo empezaba a asomar una pequeña barriguita. Casi no me compré nada de ropa premamá, prácticamente nada en realidad. Así que cuando me quedé embarazada por segunda vez, ¡lo tenía claro! Esta vez no podía ser así y quería poder disfrutar de estos meses únicos cómo se merece.
¡Ah! Uno de los planes a los que tuve que renunciar hace un par de años por culpa de la situación fueron las clases de matronatación, ¡esta vez estoy apunto de empezarlas y muero de ganas!
El sexo: “Gender reveal de Baby Two”
En el primer embarazo no quisimos saberlo. Puede parecer un clásico, pero lo único que queríamos es que todo fuera bien y que el bebé naciera sano y feliz, el sexo ¡nos daba igual! Teníamos claro que querríamos tener más hijos/as y, en aquel entonces, no teníamos ninguno, así que bienvenido lo que viniera. Creímos que mantenerlo hasta el parto sería mucho más emocionante y así fue. Esperamos hasta el día del parto y la verdad ¡lo recomiendo 100% porque fue una sensación maravillosa y una experiencia única en la vida!
En el primer embarazo lo cierto es que ni supimos ni quisimos saberlo durante todo el embarazo
Esta segunda vez tuvimos alguna duda de si repetir lo mismo o no, pero finalmente optamos por, esta vez sí, saber el sexo de nuestro/a segundo/a bebé. Sobre todo tomamos la decisión pensando en Paula. Creímos que si ya le podíamos poner un nombre en concreto desde la barriga, para ella sería todo más real. ¡Embarazo nuevo, decisión inversa!
Así que nos organizamos con nuestra familia para organizar el pasado mes de noviembre el “gender reveal” de Baby Two. Como en el primer embarazo, me realicé el test de ADN prenatal no invasivo y allí teníamos con una seguridad del 100% la respuesta sobre el sexo. Recibí los resultados por email pero no los abrí, solo se le reenvié a mi cuñada y a mi ginecóloga. Mi ginecóloga fue la encargada de decirme lo más importante: que a nivel médico todo estaba bien. Mi cuñada fue la única de la familia que lo supo antes que el resto, antes incluso que nosotros, y así alguien de total confianza nos podía organizar la sorpresa: reunimos a nuestros padres y hermanos una mañana de domingo, preparamos un bonito desayuno y allí supimos la noticia ¡todos nosotros a la vez! Aquí podéis ver el vídeo del momento exacto en que lo supimos, la forma original y divertida de cómo quisimos descubrir la noticia ¡y el sexo de nuestro/a bebé!


La verdad es que no podemos estar más felices. ¡Os seguiré contando por aquí y por Instagram!
¿Y en tu caso, qué es lo que más recuerdas de la primera mitad de tu/s embarazo/s? ¿Qué recomendación o consejo me darías?
¡Gracias siempre por leerme!