Como ya hice con el primer trimestre, en esta ocasión quiero dedicar este post a elaborar un menú ejemplo para este segundo trimestre.
Antes de empezar, te recuerdo que mi primer libro como Dietista-Nutricionista materno-infantil y mamá se titula “Alimentación en el embarazo. Consejos y menús para una gestación saludable” ¡y ya está a la venta por tan solo 9,95€ IVA incluido! Lo puedes encontrar pinchando en el enlace sobre el mismo título. Además, hay otros artículos anteriores del blog que escribí durante mi primer embarazo y que pueden ser de tu interés: “¿Embarazada? 10 primeros consejos que debes conocer”, “La alimentación en el segundo trimestre de embarazo” y “Alimentos a evitar durante el embarazo”. En el post anterior sobre el segundo trimestre, entre otras cosas, te expliqué qué cambios se producen en la mamá, cómo se desarrolla nuestro bebé y la alimentación durante estos tres próximos meses. ¡No te lo pierdas antes de seguir leyendo aquí!
En todos los post anteriores te adelanté la importancia de seguir una alimentación saludable y comer en función del apetito durante estos maravillosos nueve meses. El embarazo no es momento de “hacer dieta”, pero tampoco hay que comer por dos. Los cuerpos cetónicos derivados de una restricción calórica pasan a través de la placenta y pueden dañar al bebé.
En “La alimentación en el segundo trimestre de embarazo” vimos qué aspectos de la alimentación debemos tener en cuenta durante este segundo trimestre, pero te hago un pequeño resumen aquí.
En él vimos que los nutrientes más importantes en este segundo trimestre son:
- El yodo y el hierro
Dos minerales que ya te expliqué a fondo en el post sobre el primer trimestre, así que te sugiero que les eches un vistazo porque, a diferencia del ácido fólico (que sobre todo nos interesaba al inicio del embarazo), el yodo y el hierro siguen siendo de gran importancia también en este segundo trimestre.
- La vitamina D
Lo sorprendente de esta vitamina liposoluble es que la podemos almacenar consiguiéndola de los alimentos y, también, podemos sintetizarla en parte a través del Sol.
De todas formas, a menudo con la exposición solar no es suficiente y muchas personas presentan niveles de esta vitamina por debajo de lo recomendable. La mayor cantidad de vitamina D la encontramos consumiendo huevos, lácteos enteros (o bien semidesnatados o desnatados enriquecidos) y, sobre todo, pescado azul. Es importante la valoración individual, ya que el déficit de vitamina D durante el embarazo puede provocar parto prematuro y recién nacido con bajo peso al nacer.
- La vitamina B12
La vitamina B12 solo se encuentra en los alimentos de origen animal, como huevo, carne, pescado, marisco y lácteos.
Por eso, si la futura mamá sigue una dieta vegetariana o vegana requiere de suplementación de vitamina B12. Para estas mujeres vegetarianas, esta suplementación con vitamina B12 es necesaria siempre, estén o no embarazadas. Para el resto de mamis, es verdad que los requerimientos de esta vitamina son más altos en el embarazo, pero la ingesta habitual de las madres, o sus reservas hepáticas de B12, en general son suficientes. Aún así, su suplementación durante el embarazo está justificada, es una vitamina muy segura.
- Los beta-carotenos
Los beta-carotenos están presentes en frutas y verduras de colores naranjas, rojos y amarillos intensos, en alimentos como calabaza o zanahoria. Se puede mejorar la disponibilidad del alimento cocinado, por ejemplo, con las verduras cocidas.
Sobre todos estos nutrientes y mucho más, como te he dicho, puedes leer en el post “La alimentación en el segundo trimestre de embarazo”. También allí tienes información sobre cómo lidiar con acidez, "ardor de estómago" o pirosis y con calambres en las piernas, algunos de los síntomas más habituales en el segundo trimestre.
Pero esta vez ¡pasemos a la práctica y veamos cómo plasmar todo esto en un menú!
Un par de matices a tener en cuenta:
En cuanto a la fruta: por sus múltiples beneficios, te recomiendo escoger fruta de temporada según la estación del año en la que te encuentres y, de las raciones diarias de fruta, que una de ellas sea un cítrico, como naranja, mandarinas o kiwi; u otras frutas como fresas, por su elevado contenido en vitamina C, que ayudará a la absorción del hierro. También aprovecha las frutas de verano, como sandía o melón, por su elevado contenido en agua.
Por otro lado, no olvides la lista de alimentos a evitar en el embarazo para asegurarte que puedes comer todo lo del menú sin preocuparte, por ejemplo, comprobando que los quesos que consumas sean pasteurizados. También puedes añadir una pizca de sal yodada al día, por su aporte de yodo. Todo ello lo tienes en el post “¿Embarazada? 10 primeros consejos que debes conocer” y “Alimentos a evitar durante el embarazo”.
Aquí tienes el menú. Por favor, ten en cuenta también que es solo un ejemplo, un menú genérico que puede que no se adapte a ti o a tus necesidades. Si quieres o necesitas un menú personalizado, siempre puedes pedir cita conmigo y nos vemos en la consulta, ¿de acuerdo? Puedes pedir cita conmigo a través de WhatsApp, formulario de contacto, correo electrónico o teléfono.
Un consejo final: tu cuerpo está bastante sensibilizado y probablemente te indique bien lo que necesita. Ya sea aire fresco, ejercicio físico suave o un poco más de descanso. ¡Vive con máxima ilusión estos próximos meses de embarazo, disfruta de este momento maravilloso y escucha a tu cuerpo!
¿Qué te ha parecido? Por supuesto, pregúntame lo que necesites en los comentarios, estaré encantada de ayudarte y responder a tus dudas. En consulta también puedo ayudarte a planificar la mejor alimentación para ti en esta etapa, puedes contactar conmigo directamente en el formulario de contacto de la web.